21 de mayo de 2013

Supongo que es algo que no pierdes nunca. No es como esas llaves de casa que desaparecen un sábado misteriosamente, o ese folio en el que apuntaste aquellos datos tan importantes para tu presentación. Te acompaña, pasea contigo de la mano, te mira de forma insistente, te susurra al oído palabras que nunca deberían ser pensadas. Permanece entre los vivos y acabó con la vida de muchos muertos. Tiene una sonrisa diabólica que no hace más que hipnotizarte, llevarte a esa espiral, a ese agujero negro del que sabes que no puedes salir. Ahí sigue, mirándome desde los pies de la cama. Maldito miedo.

15 de mayo de 2013

TFG

Suponen, nos enseñan desde que somos pequeños que la vida es esto. Estudiar, estudiar, estudiar sin descanso. Digo yo, que esto está muy bien, mantener activo el intelecto nos ayuda a mejorar como personas, evita ciertas enfermedades que tienen lugar en la masa gris que es nuestro cerebro y nos acerca a los demás. Pero leches, un descanso de vez en cuando no estaría mal. Un año sabático por aquí, unas vacaciones por allá. ¿Es tanto pedir? Cuánto nos queda por aprender de nuestro colegas sajones...