Muchas veces pienso que la gente debería dejarse de gilipolleces y empezar a sentir de verdad. No han sido pocas las ocasiones en las que a lo largo de mi vida me he encontrado gente que se acomoda a otra, que se amoldan y alguna vez incluso me he acomodado yo. Y luego por las noches me da por reflexionar si es eso lo que realmente deseo. No. Pienso que todos, y me incluyo obviamente como primera de la lista, deberíamos buscar a esa persona que no sólo saca la mejor parte de nosotros sino aquella que nos haga enloquecer, ésa por la que haríamos locuras que jamás imaginamos, con la que no pares de decir "jamás pensé que yo fuera a hacer esto", alguien por quien realmente lleguemos a estar locos de atar. Ese alguien que te puede demostrar que la vida puede llegar a ser algo más que el cómodo y monótono transcurso de los días.
Ahora, y sólo ahora, es cuando me doy cuenta que mi madre tenía razón.
Lo que tenga que ser, será.
La búsqueda, para los cazadores de tesoros.
Destino, tú mueves.
No hay comentarios:
Publicar un comentario