21 de enero de 2013
Dreams work.
A veces por las noches cierro los ojos y formulo deseos con voz queda. Deseo que haya paz, deseo que no haya hambre en el mundo, deseo que desaparezcan las enfermedades, deseo que la gente sea feliz. También tengo deseos egoístas o personales, según el punto de vista. Pero ¿cómo no tenerlos? Sin embargo, esos nunca saldrán del carmín de estos labios, esos se guardan en la memoria para pasarse dentro de unos años al olvido. Todos esos deseos no son mas que sueños y para poder cumplirlos la vida nos lanza mil oportunidades. Los cazamariposas son la mejor manera de atraparlos todos. Te cedo el mío. Yo hoy por hoy, no quiero cumplir los míos, no quiero pisotear, aplastar o herir para conseguirlos. Y ésa, sería la única manera.
Cuando deseamos algo que hemos visto, tan sólo debemos alargar el brazo. Cuando lo que deseamos es un sueño, tenemos que alargar nuestro corazón.
El lector de cadáveres.
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