31 de diciembre de 2012

Un paso más cerca de lo que un día fui.


Es curioso cuando abres la cabeza de las gentes de tu vida cotidiana y ves que para todo el mundo el año ha tenido cosas malas y buenas, pero no se van a quejar, solo desean lo mejor para el año próximo, mucha salud, estar con sus amigos y chorradas de esas.
Yo antes era así, pero hoy he decidido cambiar, he dado un paso más allá para recuperar mi sonrisa. He pasado de la palabra a la acción, y tengo que decir que sienta tan jodidamente bien. Los pros y los contras, las idas y venidas, lo mas y los menos, se pueden cambiar, solo hay que darle la vuelta y mirar con perspectiva. Y yo os digo, que este 2012 he agachado la cabeza cual avestruz y he acatado las normas sociales, he seguido a la manada y me han cogido los lobos. El año próximo no será así, seré yo quien se disfrace de oveja para salir a cazar otros lobos, me dedicaré a ser yo de nuevo, a indagar en los misterios que entraña mi persona, a ser, en definitiva, dueña absoluta y total de mi destino.

Así que hoy brindo desde mi celda con ventanas por vosotros sucios bastardos.
Para que siempre seáis fieles a vosotros.
Para que no perdáis la sonrisa.
Para que nos os perdáis.
Para que no os rindáis.

Brindo por esa luz al final del túnel.

29 de diciembre de 2012

Sombra de lo que un día fue.

Una vez superado el fin del mundo, podemos afirmar que este año toca a su fin. A escasos días de las primeras campanadas del 2013 todo el mundo está preparándose para la gran fiesta de bienvenida. Yo por mi parte, no hallo felicidad alguna ni escapatoria en estas cuatro paredes acolchadas. Sí, sigo encerrada. Y mientras el mundo se alegra por haber esquivado a los jinetes del apocalipsis yo me encuentro luchando contra demonios mayores, los que acechan a la gente mientras sueña...El mundo al que pertenecía se ha desvanecido por completo y me he sumido en la más profunda de las tinieblas. Sin embargo, me niego a que este año acabe tal y como empezó, con cristales y corazones rotos. Pienso sacar todo mi armamento, dientes, uñas y fusiles hasta que al mundo no le quede más remedio que devolverme la sonrisa que hace tiempo me robó. Elijo salir del abismo. Descarto ser sombra de lo que un día fui.

Ella volverá y ellos desaparecerán. Así es como siempre debió ser.

17 de diciembre de 2012

Brindo por los pirómanos

Ante la perspectiva de que el mundo se termine dentro de 4 días me estoy dedicando a redecorar esta mohosa habitación que algunos ingenuos se empeñan en llamar vida. Todo un fin de semana invertido en armar cajas de madera en las que guardar preciados recuerdos, que aunque ligeros ocupan un gran espacio. El tiempo que me resta de esta ardua tarea lo emplearé en recolocar todo aquello que está estropeado y roto en un rincón, coger una cerilla y quemarlo sin miramientos, contemplar cómo las llamas consumen los recuerdos hechos añicos, las heridas de guerra, las falsas relaciones, las esperas, los desengaños, las conversaciones sin sentido, los sentimientos confusos, las ilusiones de ayer. Y es que al fin y al cabo, si los escépticos tienen razón y no se apaga la luz de esta tierra el 21 de Diciembre, yo aún sigo necesitando un propósito de fin y principio de año.

Y es éste.

Sacar todo lo malo para poder dar paso a la nuevo, que esperemos sea bueno.

9 de diciembre de 2012

Escala EVA

No soporto el dolor. Mi umbral está muy por debajo de la media. Para mi un pellizco llega a alcanzar una magnitud insospechada. Pero entonces me recompongo y vuelvo al ataque. Y mi enemigo se acobarda, porque en mis ojos ve lo que yo hace tiempo sospecho. Soy fuerte. Más fuerte que él. Más fuerte que todo. Tenías razón, nunca debí bajar la guardia.

16 de noviembre de 2012

Life vs. death

Por boca de alguien me llegó un dilema que me he planteado estos días. Dice así: si al nacer nos pusieran en un lado de la balanza todas las satisfacciones y alegrías y en el otro lado las decepciones y tristezas, éstas últimas pesarían muchísimo más que las primeras. Tal es así, que si nos lo mostraran la mayoría de nosotros elegiría no nacer.
Bien, yo planteo lo siguiente: ¿no es el camino duro el que nos forja el espíritu? ¿no son el esfuerzo y las decepciones de los días el sacrificio de satisfacciones futuras? A mi modo de ver, elijo vivir, con todas las consecuencias.


Incluso escondida el mi rincón, el mundo, mi mundo, a veces merece la pena.

5 de noviembre de 2012

607

74 días desde la primera sonrisa hasta el primer beso. Pero aún tuvieron que pasar 120 largas horas más hasta darme cuenta que esa historia, nuestra historia, marcaría un antes y un después en mi calendario. Y es a fecha de hoy que se me encoge la garganta, se me hace un nudo la razón y el corazón se me desboca cuando le leo, cuando recuerdo todo aquello que sentí con el simple roce de su mano sobre mi pelo. Cada segundo que me miraba descubría una nueva verdad sobre mi, me liberaba y al tiempo me atrapaba con una fuerza tan poderosa que aún hoy me ata. Recuerdo como me hacía sentir en los buenos momentos, y también en los malos, que aunque duraderos, los recuerdo con menor intensidad. Podría decirte cómo vistió cada día que le vi, podría describirte cada una de sus cien sonrisas y sus mil miradas, podría decirte lo que sentía cada instante que su piel me rozaba, podría escribir cada historia que su boca me relataba pero no podría darte nada más. Ni lugares exactos, ni fechas, ni bares ni calles, porque él me absorbía como la planta carnívora a una indefensa mosca. Y yo me dejaba. Y durante un tiempo que me resultó efímero fuimos uno, punto sobre punto, y pusimos tilde a nuestras vidas.
Ahora todo terminó y sólo quedan su recuerdo, sus textos y una vieja entrada de circo.

Es por eso que hoy me encierro aquí, lejos de mis cristales rotos, mi suciedad y mis cervezas.

19 de octubre de 2012

A la hora programada

Me he prometido que volveré, aunque me cueste. Porque volver aquí es volver inevitablemente al pasado, a los recuerdos, a él. Pero seré valiente y lo afrontaré cara a cara como tras el último encuentro. Y con una sonrisa. Siempre, con una sonrisa.

Vuelta al otoño, al frío y a la ausencia de sentimientos.

13 de septiembre de 2012

Se ofrece recompensa

Muchas veces pienso que la gente debería dejarse de gilipolleces y empezar a sentir de verdad. No han sido pocas las ocasiones en las que a lo largo de mi vida me he encontrado gente que se acomoda a otra, que se amoldan y alguna vez incluso me he acomodado yo. Y luego por las noches me da por reflexionar si es eso lo que realmente deseo. No. Pienso que todos, y me incluyo obviamente como primera de la lista, deberíamos buscar a esa persona que no sólo saca la mejor parte de nosotros sino aquella que nos haga enloquecer, ésa por la que haríamos locuras que jamás imaginamos, con la que no pares de decir "jamás pensé que yo fuera a hacer esto", alguien por quien realmente lleguemos a estar locos de atar. Ese alguien que te puede demostrar que la vida puede llegar a ser algo más que el cómodo y monótono transcurso de los días.

Ahora, y sólo ahora, es cuando me doy cuenta que mi madre tenía razón.
Lo que tenga que ser, será.
La búsqueda, para los cazadores de tesoros.
Destino, tú mueves.

¿Dónde queda eso?

Se terminó esa época clara que deja paso a un abismo de tinieblas e incertidumbre, de caminos de tierra mojados por las lluvias otoñales que pronto arreciarán los corazones de aquellos que prefieren no guarecerse ante ciclones. Yo por mi parte, elijo el camino de piedras, que aunque resbaladizo y traicionero, me proporciona los guijarros que necesito para que, si se da el momento, pueda seguirlos a la inversa para volver a casa, al hogar. Aunque claro, para eso, mucho debe torcerse el camino. De momento, espero no tropezar con demasiados lobos disfrazados de corderos. Y a lo largo del camino me iré procurando bayas curativas y enanos que protejan mi suerte como he hecho hasta ahora. Claro que, hasta entonces, debo conformarme con volver a la habitación acolchada y decir adiós al jardín sin columpios. Empieza una nueva etapa. Un nuevo curso. Un nuevo encierro.

10 de septiembre de 2012

Cambios

He intentado mil veces cambiar. Siempre me digo que debería ser mejor persona para sentirme mejor conmigo misma, para hacer sentir mejor a los que me rodean. Pero entonces me acobardo y recuerdo que siendo yo misma, soy frágil, débil y delicada, que no tengo nada que aportar al mundo. He perdido toda la fortaleza. Sin embargo, durante unos instantes alguien me hizo creer que yo valía más, que era alguien importante en el mundo, que podía cambiar las cosas. Y hasta hoy, es el único que realmente me ha demostrado que puedo significar algo en el mundo de otra persona.

Luego está él, que es tema aparte, porque cuando estoy con él no necesito intentar ser mejor. Gracias por hacerme ser la mejor versión de mi misma.

7 de septiembre de 2012

Fragilidad en una botella

Es curioso, me digo siempre, el hecho de ver como ciertas cosas que te han acompañado a lo largo de todo un camino de estrecheces, recovecos, parajes oscuros y cielos soleados puede llegar a adquirir ese valor que ni los diamantes ni el oro ni la gasolina en tiempos de crisis pueden alcanzar. Y luego de repente, ese algo hace que el corazón deje de latir durante una milésima de segundo, que la respiración se entrecorte y un sudor frío sea el que se encargue de bañar tu espalda. Es una sensación como la que tienes cuando guardas un tesoro muy preciado en papel de burbujas para que no se rompa, y entonces llega alguien, lo desenvuelve y mira al suelo son una sonrisa satisfactoria que sabes bien lo que significa; claro que al fin y al cabo la culpa no es sólo ajena, llegan entonces los autorreproches: ojalá lo hubiera escondido mejor, debería haberlo envuelto más, no debería haber dejado entrar a esa persona... Ves como el mundo, tu mundo se acerca peligrosamente al suelo y te lanzas a rescatarlo. No soportarías ver como se jode, sí, no se rompe ni se estropea, sencillamente se jode; y sólo de pensarlo romperías a llorar hasta crear un océano de lágrimas. Por suerte para mi, la habitación está acolchada para evitar que los autolesivos nos hagamos daño. Y así me siento una semana después de que casi se rompa mi cerveza clara de importación de 21 años.
10 años juntas, un segundo más, y no podría volver a saborearla.



Note to self: not to let anyone in.

16 de agosto de 2012

Si no te oigo respirar una sola vez más, puede que muera.
Si no respiro, moriré. 
Si me despierto de madrugada y no te veo quitándome la sábana, puede que muera. 
Si no respiro, moriré. 
Si paso una tarde más sin la compañía de tus abrazos, puede que muera. 
Si no respiro, moriré. 
Si me pierdo tus palabras, tus sonrisas, tus caricias, tus miradas, puede que muera. 
Si no respiro, moriré. 
Sólo por hoy, elijo respirar. 
Mañana ya habrá tiempo para morir si tú no estás.

28 de julio de 2012

Parón

No esperaba que una semana en el exilio diera tanto de sí. Realmente, no esperaba nada en absoluto. No imaginaba tantas risas, ni tantas anécdotas, ni tantas tonterías, ni tanto apego hacia ellas. Imaginaba unas vacaciones sin más, que últimamente es lo único que me acompaña. Pero como sólo ellas saben hacer, una vez más me sorprendieron, las que me sacan de las nubes con las que me embeleso y me pegan una voz para que ponga rumbo a la tierra. Me han demostrado mucho en estos días, he aprendido mucho, he tenido tiempo para pensar, reflexionar, reír y luego no pensar en nada más. Es cierto eso de que a veces, alejarse del epicentro de tu vida puede tener efectos positivos. Y ahora, a disfrutar de la reclusión unos días más, en compañía de otra mujer recién llegada del exilio, con mil historias por contar.



Prometo echarte de menos, 
no sólo esta noche, 
sino todas las noches que no estés a menos de 5cm.

4 de julio de 2012

Curiosità

Conservo esta peculiaridad desde que tengo uso de razón. Me gustan los porqués y los cómo, las explicaciones, los entresijos que traen con ellas y los nuevos descubrimientos a los que me llevan. No hace falta más que mirar la colección de libros de mi estantería, habrá pocos temas que no toquen: anatomía, psicología, ciencias naturales, física, fotografía... Existen un sinfín de cosas en el mundo sobre las que jamás llegaré a saber mucho, pero soy de las que cree que es más valioso saber un poco de todo y saberlo bien, que saber únicamente mucho de una sola cosa, que al fin y al cabo puede desmoronarse en algún momento. Siempre dispuesta a aprender algo nuevo antes de acostarme, esa soy yo en este lugar lleno de deshechos humanos, sin ánimo de ofender. Por eso nunca he comprendido del todo bien porqué la sociedad se empeña en mitigar la curiosidad de los más pequeños a base de respuestas falsas, riñas y demás que llevan a estos pequeños seres a perder todo su afán descubridor. Y es que no hay más que ver que algunos sinónimos de esta venerable actitud son fisgonear, entrometerse, cotillear...nada más lejos de la realidad, que es aprender. Suerte que yo soy aún como una niña pequeña y no han conseguido mitigar ese espíritu. Y esta noche la he pasado acompañada de mi buen amigo Higgs.




La curiosidad es el arma que protege frente a la ignorancia.
Esa cualidad que jamás a nadie se le debería arrebatar.

21 de junio de 2012

Verdades a medias

No recuerdo ya en que momento he comenzado a recobrar la lucidez. Creo que ha surgido así, de improviso, como una tormenta de verano que te pilla en sandalias. Los días se iban sucediendo monótonos, aburridos, idénticos, sin más variación que el número de la última página leída o algún rostro nuevo entre las paredes de ese agónico lugar de culto al ejercicio. Mientras los carceleros no me veían he cometido alguna nueva estupidez y me he bebido algún que otro trago de ese glorioso placer de dioses que es el alcohol. Pero no me arrepiento. A lo hecho pecho como se suele decir. El caso de todas estas ligeras divagaciones es informar al mundo que me ignora y no me escucha que soy un poco más sensata que ayer, pero menos que mañana. He aprendido a soñar despierta sin creer realmente los actos de mis ensoñaciones. He comprendido que no puedo querer aquello que no puedo tener. Y ahora usaré los errores del pasado para construir un nuevo futuro, en el que de momento, no quiero pensar.

Es broma, sigo siendo el mismo renglón torcido sin remedio, la demente número 8.
Sírvame otra cerveza de malta Señor Hipogrifo. Se aproxima el solsticio...

7 de junio de 2012

Vacaciones

Me quedan 41min (30%). ¿Para qué? No lo sé exactamente, eso dicta la pantalla de este agotado ordenador. Puede que cuando el reloj deje de latir, el corazón deje de hacer tictac. Puede que la fiebre vuelva al ataque cuando acabe estas líneas. Puede que la medicación deje de hacer efecto. Puede que al fin cierre la puerta de mi cueva para siempre. Puede que en verdad te eche pronto ese discurso que he estado preparando toda la noche. Puede que al final del discurso hasta te de un beso de despedida. Vaya, había olvidado lo mucho que me gustan las suposiciones, sobre todo, aquéllas que sé que no veré cumplidas. Al menos algo tengo por seguro, estoy loca, hay múltiples motivos para mi locura, lo sé, pero este verano, pienso darle a uno de ellos unas vacaciones. Me las merezco por no ser chica julio. Quedan 36min  (19%)

Una batería tan incomprensible como yo.

1 de junio de 2012


Algunas noches, cuando menos me lo espero, la gente me sorprende.
¡Qué demonios! A veces hasta yo me sorprendo.
Siempre encuentra la forma de colarse en mi vida
no sé si es culpa mía por dejar rendijas abiertas
o de su empeño por no querer salir de esta jaula de grillos.

19 de mayo de 2012

En días de lluvia

Estar con ella es como hacer que cada día sea una noche de domingo. Una de esas en las que haces recuento semanal, balance de pros y contras, contraste de blancos y negros. Es como esa hermana que se te aparece a las tantas de la madrugada para desvelarte con historias para no dormir. Hablar con ella es deja que fluya el tiempo y no ponerle límites al reloj. 4 días, 4 meses, 4 años, la cantidad de tiempo que pase alejada de ella es una nimiedad, y no importa que no haya habido comunicación de por medio, siempre vuelve, siempre vuelvo. Ella lo es todo, ahora, y siempre. Es mi familia fuera del núcleo familiar, es esa amiga que nunca te olvida, a la que nunca puedes olvidar. Y sólo cuando vuelves a verla te das cuenta de lo mucho que la has echado de menos.

Por mil comidas más en el "burriking" que duren 5 h. 

Inf.

12 de mayo de 2012

El bueno, el malo y la tonta

"Nunca he visto morir tan estúpidamente, ¿qué te parece?"
(Conciencia: Ciertamente tiene razón, ¿a quién se le ocurre poner el corazón encima de la mesa para que se lo aplasten? Estúpida.)
Ese empeño inaudito en no dar la razón a nadie, ni siquiera a alguna de mis otras personalidades. Ése empeño de convertir al malo de la película en el bueno y de dejar a éste relegado a un segundo puesto que no le corresponde. ¿Te gustan los acertijos? ¿no? A mi me encantan, ya sabes, por eso de darle vueltas a la cabeza, pensar, preguntar, obsesionarme, todas esas cosas que se me dan tan bien cuando estoy encerrada en estas 4 paredes, o en 6 o en 8 (el número es indiferente) Él no es el bueno fue la última frase de una noche que llevaba soñando meses. La última frase, la que cayó como un témpano helado en mis oídos, a la que darle vueltas de camino a mi prisión particular. Yo ya sé quien es el bueno de mi película, sólo espero el día que yo misma pueda darme cuenta.

*El bueno que no llega, el malo que no se va, la tonta que es cruel.*

6 de mayo de 2012

Ellos han vuelto...

Fue todo tan extrañamente normal. Mis 10 secuestradores llegaron tarde al encuentro, como no podía ser menos, y me concedieron unos momentos más de libertad antes de capturarme entre sus redes de nuevo. He salido del exilio para meterme en su cueva otra vez, pero me gusta. Al fin lo consiguieron, me echaron el anzuelo, y piqué sin remedio. Entre esas 4 paredes me volvía a sentir como si el tiempo transcurriera a una velocidad muy inferior a la normal, como si las agujas del reloj nos dieran un respiro cada segundo. Todo volvía a esa normalidad monótona y divertida que tanto anhelaba. Y sus abrazos. Cómo echaba de menos sus abrazos.

4 de mayo de 2012

Rutina


Ese temblor muscular que hacía tiempo que no sentía. Esas mariposas en el estómago
que siempre me han dado ganas de echar a volar cual hoja mecida por la brisa
otoñal. Las lágrimas que se reisten a brotar, pero que ahí están, al acecho. Los
sentimientos a flor de piel como siempre debería ser. Soy una persona poco cariñosa,
es cierto, no me gusta demostrar lo que siento, no me sale, no va acorde con alguna de
mis múltiples personalidades (aún no he descubierto con cuál), pero hoy, hoy no voy a
escatimar ni en besos ni en abrazos. No voy a dejar pasar ni un sólo momento en el
que pueda sacarle una sonrisa a alguien como me gusta hacer siempre. Hoy es un día
diferente, es un día más alegre que todos los de estos últimos meses en el exilio.
Vuelvo a tenerle a más de 2000 km. pero ¿sabes qué? Ahora ya no duelen tanto, ni
su presencia ni su ausencia, aunque ahí siguen esas ganas locas de ser la que
desvía sus pensamientos y la que le atrae de nuevo a la tierra. Pero esperaré hasta
que me canse de hacerlo. Paciencia, eso sí que me sobra.
Pero volvamos a lo importante, a la gente que vuelvo a tener a tiro de piedra.
Volver a los viernes de kebaba y Filan, a los sábados sin sentido, a los domingos
de cafés y confesiones, a los lunes de apuntes y balances fáunicos, a las semanas
eternas con la cabeza echando humo y con ella soplando para que vea lo lindo
que es el día. A todos vosotros, a los que me habéis hecho comprender, que a pesar
de lo que he dicho siempre, puedo llegar a ser importante en la vida de alguien.
Gracias. Por lo que ha sido, lo que es y lo que será. Os quiero, sin remedio.

No queda nada

10 horas es lo que me separa de la vuelta al dulce y angosto hogar que tanto anhelo a ratos. Sí, he de ser sincera, es angustioso estar lejos de todo aquello que conoces, que te arropa, pero esa sensación de libertad, de aire puro, de falta de ataduras, es lo que siempre ha querido salir a la luz de mi pequeño ser. Es todo lo que soy, una loca desquiciada sin cuerdas ni cadenas que le permitan atarse a un punto fijo, a alguien fijo. Realmente, es algo que ni siquiera me gustaría ser. Echaré de menos las escapadas de fin de semana, el alcohol a altas y no tan altas horas de la noche, el probar cada día una nueva cerveza, descubrir una calle cada semana que te lleve a algún puesto peculiar. Les echaré de menos a todos ellos, a los que han hecho de este exilio un lugar agradable donde, a veces, no siempre, apetece quedarse.

27 de abril de 2012

Mix

Últimos 7 días del exilio. Emoción. Nervios. Estrés. Ansiedad. Ganas de gritar, de abrazar, de besar, de saltar, de correr, de trepar, de cantar, de silbar, de llorar. Soy un amasijo de emociones ahora mismo, tantas que no sé por dónde empezar. Sé donde comienza mi fin de semana, pero aún no sé dónde acabara. Os doy una semana de descanso de locuras y cerveza.

PD: luego me llaman taciturna

21 de abril de 2012

¿Te cuento un secreto?
No necesito excusas ni pretextos
sólo viajes matinales a tu boca
y esconderme entre las sábanas al amanecer
después de haber recorrido todo tu cuerpo de madrugada
de aprenderme de memoria cada lunar de tu espalda.
Yo sólo necesito que sepas algo
que me muero cada noche
cuando me llamas y luego te escondes.
Sólo quiero que me aguantes la mirada
5 segundos
mientras me dices
que tú y yo jamás podremos tener nada.
Es todo lo que necesito,
la libertad de no seguir bajo tu dominio.

20 de abril de 2012

A la 01.30

He dejado la poesía. He cerrado los libros con historias de amor y he abierto uno de rosas y espinas. Otra vez vuelvo a consumirme entre los pedazos de lo que quisiera ser y a lo que no puedo aspirar. De nuevo la cera me quema las manos, la llama se apaga. Y no puedo hacer más que sentarme a esperar. ¿Qué? He hecho todo lo que he podido y nada ha cambiado, nada hemos cambiado. Las velas se han consumido y el gas del mechero se ha terminado. La psicología me ha jugado malas pasadas, y no quiero ni pensar en el alcohol y mi subconsciente, a los que sólo quiero evitar ya. Hoy al menos, no recuerdo cada instante con nitidez, los recuerdos se van volviendo borrosos. Primer paso. Por ahora que aún no he olvidado del todo me conformo con esperar, 2 semanas más, a que llegues un viernes a las tantas de la madrugada y poder abrazarte y decirte que el mundo, nuestro mundo, vuelve a ser el de siempre.

17 de abril de 2012

Último aviso

El corazón en un puño y la daga en el otro. La reacción adecuada le dictaba su conciencia, no merecía más que esto. El último gesto de desprecio tras una vida entera de enfrentamientos. Debía darse prisa, no tardarían en llegar. Míralo, ahí tirado, con los ojos en blanco como si esto no fuera con él, como si el músculo que latía con fuerza y en silencio fuera a hacerlo para siempre. Hubo un momento en el que no se creyó capaz, cuando la lluvia empezó a golpear el cristal, a recordarle todos los cristales rotos que le había clavado. Se había tomado la justicia por su mano, al fin y al cabo, no le quedaba otra ante una sociedad que se empeñaba en acallar sus gritos con música a todo volumen y sirenas que aullaban sin cesar. Las cicatrices hablaban por sí solas, ella había dejado de hacerlo hacía mucho tiempo. *rasss* Se acabaron los latidos, se acabó el sufrir. Silencio, calma al fin.

*Sirenas*

Otra vez de vuelta al encierro. Pero al menos esta vez, había cumplido su misión.

12 de abril de 2012

Cuesta arriba.

La vida de esta loca en el exilio comienza a hacerse dura. Estoy cansada, muy cansada...las drogas empiezan a hacer efecto. Duendes, elefante rosa de sombrero y capa, león de la bici con cestita, hora de irse a la cama. Buenas noches mundo, para otro día el recuento de locuras.

24 de marzo de 2012

Si quieres te lo presto.

¿Ves esa cosa amarilla de mis fotos? Se llama Napito, y a pesar de la opinión de muchos no es sólo un peluche blandito. Napito es un aventurero sagaz e indomable, como ella. Es el símbolo de muchas cosas que poca gente comprende, porque son conceptos que con los años vamos dejando atrás. Napito representa la libertad del primer viaje de verano con tus amigos, las ganas de comerse el mundo a bocados, el ansia de dar la vuelta a la esquina y descubrir un mundo nuevo, la necesidad de perseguir tus sueños para poder seguir creciendo por dentro (porque cultivar la mente siempre será mucho más importante que cultivar el cuerpo, por mucho que los medios traten de convencernos de lo contrario). Él es un sentimiento hecho de algodón naranja y amarillo, es el apoyo que se necesita cuando estás aquí sola en el exilio y tus amigos imaginarios sólo pueden mandarte abrazos virtuales. Es el confesionario perfecto de todo loco que se precie. Una vez en un viaje a una ciudad que ella y yo conocemos estuve a punto de perderlo, al igual que la cordura. No, espera,de ésto último nunca he tenido. Vuelvo al hilo, por un instante me asusté, casi fue como perderlos a ellos. Por suerte, alguien con un gran corazón lo dejó sobre una ventana, pensando probablemente que sería de un pobre niño, bendita inocencia. Por cierto, gracias desconocido. Es fotogénico, divertido, callado, atento, y goloso. Un yo en peluche (viva la modestia)
Y si lo quieres, es todo tuyo. Cuídalo como me cuidas a mi, bueno, un poco mejor.
Por ella, por la futura Erasmus en Italia.
Aún no te has ido, y ya siento lo mucho que te echaré de menos.
Este verano lo haré inolvidable, y las visitas que te haga luego también.


PD: ¡no lo pierdas por lo que más quieras!

13 de marzo de 2012

Colgando de un hilo

Todo suciedad, polvo, polución. Quizás haya algo de verdad cuando dice que todos están podridos por dentro, la sociedad en general, la gente que conocemos en particular. Tal vez sea cierto eso de que ahora vivo mejor en el exilio, lejos de todo, de todos, sin esforzarme lo más mínimo en conocer a las personas, en saber como son, porque decepciones es lo único que siempre llevo en el atillo que cargo, puede que esta vida no esté tan mal. Al menos para él. Está desencantado con el mundo, y a veces, yo también. No lo había notado hasta ahora, había tenido una ligera sospecha, estaba ahí, siempre. Necesita un cambio, ¿quién no? Pero yo necesito de nuevo el calor humano, un abrazo sincero, un beso cariñoso, algo que me ayude a creer que el mundo puede ser un lugar mejor. Y creo que él también necesita un abrazo.


Te echo de menos, una riña y media.

9 de marzo de 2012

PN accidentado

Carnets regalados en tómbolas en las fiestas de mi barrio, claro, luego pasa lo que pasa. Sustos como éste.  Y que tu compi de piso vaya en ese coche blanco de la esquina inferior izquierda. Y que por culpa de subnormales su vida haya pasado por delante de sus ojos en medio segundo. Debe ser impactante eso, me gustaría probarlo algún día, allá por los 100 años y medio corazón en un puño y el otro medio en algún bote con formol. A lo que iba, que el alcohol me desestabiliza. Italianos, aprended a conducir, o de un accidente con la bici de aquí a mayo no me libra nadie. Esperemos que se pase el shock, que los ríos vuelvan a su cauce, y que hable la justicia y dicte sentencia justa (que ingenua puedo ser a veces) y de paso que os den unas clases de humanidad, que tener a alguien de prácticas después de esto, ni medio normal. Por suerte queridos lectores, no, no hubo víctimas mortales.

Pord'a'none ha dejado de ser un sitio seguro. Escondan a sus hijos. ¡Ah no, espera! Que eso ya lo hacen de normal. Me tiene un poco hastiada estos friulanos...

Incidente

A veces, ciertas noches, me persigue su fantasma. Me obliga a rememorar todo aquello que mi yo presente se empeña en olvidar. Es como tener un accidente, tras el momento de shock, lágrimas o carcajadas, llega el impacto brutal, el momento en el que te das cuenta de lo que acabas de vivir. Y yo he terminado el shock y estoy en fase de aceptación. En esa en la que tengo que repetirme a diario que nada volverá a ser como antes, que las cosas pasan por un motivo y punto, que no habrá más domingos soleados ni más circos del terror, que yo sé que él es la pieza que falta en este rompecabezas, pero que le vamos a hacer, de momento quedará incompleto. Puede que algún día aparezca una pieza mejor. O puede que no. Siempre nos quedará la cerveza.

Co-razas

Otra vez me asfixiaré entre los escombros del muro caído, de las paredes de la coraza que tardé ¿cuánto? ¿10 años? ¿más? en derribar. Me ha costado sudor y lágrimas, muchas horas y más confesiones secretas. Miles de horas invertidas en su vida, en aprender a formar parte de ella, y lo conseguí. Siempre va de chico duro por la vida, pero me echa de menos, lo sé, lo sabe, lo que pasa que a veces le cuesta trabajo darse cuenta. Pero tranquilo, algún día volveré un viernes a nuestra esquina de siempre para contarte que mi vida amorosa sigue siendo una mierda y para que tú me cuentes tonterías y paparruchas de las tuyas, o me hagas reír, o incluso llorar, pero de la risa, sé que no te gusta ver como me ridiculizo en público. Ves, no he cambiado nada. Seguirás siendo el único que sepa cuando callar, cuando dar un abrazo e incluso, si te sientes generoso, cuando dar un beso. Eres un mimoso incontrolable, aunque esto nadie lo sabe, nuestro secreto. 
Hay quién diría que lo nuestro es amor del bueJAJAJA, no puedo ni seguir, pobres infelices. Yo te quiero, y te lo digo poco, para que no te crezcas mucho. Te queda toda una vida para aguantarme, desde Italia, Polonia, Laponia o el fin del mundo. Te jodes. Es el precio a pagar porque tu vida sea más divertida conmigo en ella (como me quiero, casi más que tú a ti mismo)
Podría vivir sin ti, pero es que no me apetece.

(No hay quién se lo crea ¿eh?)

Bb.

1 de marzo de 2012

Regalos con retraso

y amigas.
Por días como estos merece la pena seguir respirando y pegando patadas al mundo con los Alpino. Por esa gente que hace que sonrías como una imbécil en una calle llena de jodidos friulanos cuadriculados inmersos en sus problemas. Cuando el momento de abrir un paquete de la posta está repleto de ansia y emoción, y cuando mientras lees la carta que esas personas te han escrito tienes que contenerte las ganas de abrazarlas lo que dura un año lunar porque no están a tu lado para que esto sea llevado a cabo. Luego llega el momento de seguir instrucciones, porque sólo ellas saben que te encantan los juegos y gymkanas de niños. Y quitas el papel de burbujas (me encanta, y encima es verde) y sacas los cartones con la bola del mundo. Puede que sea casualidad o puede que no, no te importa, prefieres pensar que lo han hecho a propósito por tus ansias de viajar con ellas. Luego aparecen las fotos, y con ellas las notas y los mil recuerdos detrás de cada una de ellas. Todos especiales a su manera, todos divertidos, todos pasados. Y las echas de menos. Más que nunca. En dos meses lo compensarás, lo sabes, lo saben.

Mi compañera de viajes.
Mi no amiga cuando estoy lejos de casa.
Vosotras.
My everything.

22 de febrero de 2012

Uno más, uno menos.

Un mes en el exilio. Un mes sin más inspiración que el gélido aire de las mañanas friulanas, sin más motivación que portarme bien para que me dejen regresar a casa y sin más ganas de vivir que las que me aporta el mero hecho de pensar que mañana puede ser un buen día (bendita inocencia) Ha sido un mes montaña rusa, como casi siempre y como nunca. ¿Me he arrepentido? Sí, de muchas cosas, pero no del exilio. Me va bien aunque todos mis recuerdos aquí plasmados tengan un tono agridulce. Sigo siendo yo, un poco más ocupada, un poco más estresada, y a veces, quiero pensar, que un poco más feliz. Pero no nos engañemos, mi felicidad dura tanto como el avistamiento de una estrella fugaz. Siempre aparece algú meteorito que lo jode todo. Por suerte, queda menos para que paguen mi fianza y me dejen volver al hogar, al frío y mohoso lugar del que quizás, no debería volver a salir. La experiencia será positiva, me lo repito, me lo repiten, y hoy aún tengo fuerzas para creérmelo.
Y puede que incluso para olvidar.

Ya va quedando menos.

17 de febrero de 2012

Con la máscara en la mano

Papel maché, cajas de cartón, monos de colores, gafas extravagantes, cascos, mordedores, hombreras, sombreros, maquillaje, pelucas. Todo para el carnaval. Todo para la fiesta que marca un antes y un después en mi año. Todo para el festejo que esta vez no podré vivir donde quiero.
Estoy aprendiendo muchas cosas, conociendo a mucha gente, aprovechando para conocerme un poco mejor a mi, pero el sentimiento de opresión por no poder estar ahí está siempre presente. Cada mañana cuando me levanto, me miro en el espejo hecho añicos y me pongo mis ropas con jirones y trato de convencerme de que ésta será una gran experiencia. Estoy ampliando mis horizontes, aprendiendo a ser más crítica a la par que más permisiva con los otros. Me doy cuenta de cómo es el mundo más allá de lo que eran mis 4 paredes rocosas. Pero echo de menos mis paredes, el moho, la cerveza, las salidas nocturnas sin hora de regreso. Es difícil acostumbrarse a esto, pero lo haré, se me da bien adaptarme. Eso, y hacer reflexionar a la gente. Ah, y también fracasar.

12 de febrero de 2012

A 2000km.

Llegar a casa a las 2 de la mañana. No se ha acordado. Nunca se acuerda. Nunca lo hará. Hora de que deje de importarme. Este cambio de vida será un recuerdo diferente, divertido y dulce, del que él no formará parte.
Gracias a los 4 "challenge accepted Pordenone" por un cumpleaños diferente, divertido y en el que no ha sido necesario pensar en nada más.
Gracias a todos ellos, a los que echo de menos, a los que celebran mi cumpleaños sin mi, a los que me recuerdan y me quieren aunque esté lejos, gracias por los mensajes, por los ánimos cuando más los necesito, por los te echamos de menos hoy, gracias por hacer desear que vuelva a casa para veros. Os quiero, a todos, sin excepción. Celebradme por todo lo alto. Y guardadme algo para el 5 de Mayo.

11 de febrero de 2012

De velas y tartas

+ 1,2,3,4...
- ¿dónde está el mechero?
+ Ni puta idea, búscalo. Mierda ya me perdí. 1,2,3...
- Oye ¿dónde se apagan las luces?
+ Estamos en una jodida cueva, ¿de verdad te crees que vas a encontrar luces?
- Toma anda, bébete esto y coge las velas que ponen 1 y 2.
+ ¿Qué es?
- ¿Tú que crees? Cerveza. Te sienta fatal cumplir años.
+ Mentira, lo que ocurre es que odio lo de las velas, y los regalos, y dar gracias y sonreír, odio parecer feliz cuando no lo soy. Odio que la gente crea que todo va bien y ver como en realidad mi universo se desmorona.  Odio que él no esté aquí. Pero lo que más odio es que no estén ellos.
- Te acostumbrarás. Yo lo hice.
+ Tú aún no le has cerrado la puerta, te recuerdo que la llave la tengo yo.
- Pero lo haré, algún día, lo haremos, las dos. Cerraremos las puertas y tapiaremos las ventanas, y tendremos una bonita vida llena de luz fuera de esta mohosa cueva. Y habrá cerveza.
+ Brindo por eso.
- Y por ti.
+ Feliz cumpleaños a mi.
- Ya puedes cortar la tarta. Deja de mirarte las venas, sádica.
+ Uno grande para mi, otro grande para ti. Se acabó lo de compartir, a partir de ahora, solas tú y yo.

6 de febrero de 2012

Cualquier tiempo pasado...

Por fin he decidido poner un poco de orden a los discos y tirar aquellos que ya no servían (leyes nuevas que no permiten escuchar la música que deseas, esto es así, una mierda vamos) He cambiado poca cosa, sigo con el mismo estilo de vida, y por tanto con el mismo estilo de música, pero viene bien de vez en cuando desempolvar la música vieja. Mis reyes llegaron hoy a casa, y traían bajo el brazo dos vinilos antiguos de Ramazzotti. Para la mayoría de la gente será un regalo carente de valor, vivimos en una sociedad que juzga en exceso las cosas por el precio que éstas marcan en las etiquetas. Pero este trozo de plástico, para mi es historia, es el pasado de mi presente, el legado de alguien que nunca debió marcharse, y a quien en ocasiones, por no decir a diario, tengo presente en mi vida. Todo sería tan distinto si él estuviera, si sus consejos no fueran ilusiones y sus palabras vagos recuerdos. Por suerte, aún le veo en sueños.


...fue mejor.

31 de enero de 2012

Yo no soy marinero,soy un delfín

*Suena Rafa Pons: seguir remando o hundir al barca...*

¿Cuántas veces he pensado en hundir mi barca? ¿Cuántas veces habré tenido el martillo en la mano dispuesta a hacerla añicos y acompañarla al fondo como buen capitán al fin? He de aclarar que mi barca está hecha de despojos de otras anteriores, porque siempre, acabo hundiéndome, no sé si por idiota o por autodestructiva o por ambas. Puede que ése sea mi sino, destruir, recomponer y seguir remando. El problema es que en mi barca se mezclan hechos pasados y presentes, constructivos y destructivos, buenos y malos, agradables y punzantes. También gente, gente a la que he transformado a lo largo de los años, algunos en amigos, otros en conocidos, otros en viejas amistades, y otros los he tirado por la borda, porque estaban totalmente inutilizables. Creo que seguiré remando, mis amigos no merecen que les pegue un martillazo (al menos no de momento)

Gracias Refle, Bobo, Pin, Cosa, Tufito, mamá, por estar siempre ahí, dónde más os necesito.
Gracias por ser todo lo bueno de mis 22 años lunares.

*no sé si cagar o tocar el arpa...FIN*

Me reinvento

Nuova stanza. Nueva cueva donde resguardarme del frío invierno, sí, he vuelto a escaparme, me ha dado otro brote de psicosis, y aquí estoy, dedicándole unas palabras al aire que comprime mis pulmones. Ésta vez no hay polvo, ni cristales rotos, ni animales muertos a cada paso, por no haber, ni siquiera hay cerveza. Dios...no...tengo...cerveza...Vale vale, puedo superar esta crisis. Vuelvo al hilo de la cuestión, sólo quería que supierais que tengo otra dirección, otra que no compartiré, no me apetecen visitas en esta huida, ni la tuya tan siquiera.

29 de enero de 2012

Round 2

No sabría por dónde empezar. El combate ha sido demoledor. A partir del primer derechazo todo se volvió borroso y confuso. Aún no sé como puedo seguir en pie, la toalla lleva horas chorreando sangre, y creo que he perdido un par de dientes (joder, creo que el dentista me va a matar) A veces me asombro con mi propia fuerza, es increíble, puede que sea cosa de tanta cerveza consumida a lo largo de mis encierros. Pero a ver, que me desvío, la cuestión es que para mi todo está borroso, pero guardo barcas en las lagunas que se iluminan cuando piso sobre ellas, la pregunta es, ¿mi contrincante recordará algo?

27 de enero de 2012

Hang on baby

Sigo siendo la misma. Sigo siendo la persona excéntrica, rara y peculiar que abandonó su tierra no hace ni tan siquiera una semana. Sigo colgada en la red, debatiendo muchas veces si soltarme o seguir colgada. A veces sueño que me caigo, y me dejo caer en el profundo abismo, oscuro, frío, que me atrapa con su tétrica melodía y me sume en la más profunda tristeza y desesperación. Otras veces sueño que saco fuerzas de flaqueza y aguanto bien arriba, donde las garras del miedo no pueden alcanzarme y al fin puedo ser feliz. Feliz, cómo echo de menos ser feliz.

Pero hoy sigo aquí, una mano colgando, la otra soportando el peso de mis errores.
No sé cuánto tardaré en caer.

25 de enero de 2012

Veredicto: culpable

Se desvía el camino, me dicen izquierda y por primera vez en mi vida creo que les haré caso. Mi sentido común y mi sensatez han dictado sentencia. Locura paranoide e ilusoria. Una vida llena de fantasía y desvaríos por doquier, de malas interpretaciones y de sueños absurdos. La condena: meses de incertidumbre y hambre de calor humano, pero no de cualquiera claro, estaré loca pero sigo con mis exquisiteces. ¿Cómo sobreviviré? ¡Quién sabe! Puede que muera en el intento y resurja de mis cenizas algo mejorada, con más canas y su consabida sabiduría. No lo sé, puede, que simplemente siga viviendo y que todos mis recuerdos sigan atormentándome hasta el fin de mis días cuando mar y tierra se fundan en uno y a mi me coman los gusanos. Maldita tortura esta del arrepentimiento tardío.

20 de enero de 2012

Planeta Agostini II

Me gusta llegar a casa y que me den un masaje en mi espalda dolorida, me gusta comer mejillones y discutir sobre qué serán esos pelillos que les quitamos para hacer el paté. Me gustan los domingos de sándwiches, pelis, palomitas y cotilleos. Me gusta sentir que tengo a alguien en quien siempre puedo confiar. Me gusta levantarme de la habitación y que aparezca por el pasillo a oscuras y las dos brinquemos del susto. Me gusta que me invada mi habitación los fines de semana hasta las tantas de la madrugada para contarme sus desvaríos múltiples. Me gusta eso de que me grite desde el salón: ¡Eh! ¿Te hace una partida rápida a la Wii? y que la partida acabe 2 horas después con un montón de muñecos en el agua. Me gusta ver fotos viejas y reír hasta llorar, contar monedas y meterlas en plásticos o ver CanalCocina y morir de risa por una casita de chocolate. Hay mil cosas que me encantan de ella, pero sobre todo, esa sensación de no estar sola en casa, de que ella siempre está ahí.
3 meses, quizá se me haga demasiado raro. La echaré de menos. Tufito.


Esto de mi partida del centro me está volviendo más sensiblera de lo normal.

15 de enero de 2012

Resumen

A veces no nos queda más remedio, o pateas o te patean. Y no me refiero sólo a las personas, cuyo número de afiliados a "Me encanta joder la vida de los demás" aumenta exponencialmente a la vez que el número de parados de España, también me refiero a los problemas. Esta ha sido una semana de enfrentamientos con apuntes y cerveza, gente estúpida y cerveza, madrugones y cerveza, risas y sidras (es la la primera opción un viernes frío de invierno en una terraza, siempre) pero también ha sido una semana de demostraciones. De demostrar lo que vales, lo que tienes y lo que quieres conservar. Ha sido el momento de enfrentar los problemas a la cara y reírte de ellos, de comprobar que eres capaz si quieres de elevar la felicidad de una persona a pesar de lo muy puteada que pueda estar. Me siento orgullosa de ella (sabe de sobra quién es) y yo, a diferencia de otra gente, no pienso dejarla escapar.

9 de enero de 2012

Mi pro-vocación

Es como un pedacito de cielo en medio de toda esta mierda. Es esa bocanada de aire fresco que ansías conseguir en una ciudad anegada por humos destructivos. Es como una taza de chocolate caliente y una buena conversación entre amigos y mantas un domingo frío de invierno. Es como esa canción que no puede evitar que sonrías, o como esas palabras que te susurran al oído y hacen que rías entre mares de lágrimas. Es mi salida, mi escapatoria, mi forma de evasión del mundo. Es mi libro, sus poemas, sus palabras. Es la página 107 y esos versos que te erizan el vello del alma. Es de las pocas cosas que me acompañarán en mi viaje.



15 días.

6 de enero de 2012

Juicio rápido

Sigue siendo injusto. No me refiero al mundo, pues éste lo lleva siendo desde el principio de los tiempos. Yo esta vez quería llamar a declarar a tus palabras, las injustas, ésas que tiñen de colores alegres los días más oscuros y me invitan a creer en la absurda ilusión de poder tenerte más y más cerca. Hoy les toca subirse al estrado y confesar que me han estado engañando. Quiero oírlas admitir ante este jurado, que es mi sano juicio (el poco que queda) y mi escasa sensatez, que son escogidas con sumo cuidado, cómo quién arranca una rosa y presume de no querer pincharse (pobres ilusos, las espinas nunca desaparecerán) y que incurren en el delito de crear falsas ilusiones. Y después, querido juez, deseo que las encerréis de por vida, no me digáis donde, para que así yo no recaiga en la estupidez de socorrerlas, como tantas otras veces que he llegado a sumergirme en lo más profundo y arriesgar mi vida por volver a oír/verlas. Sólo espero que la sentencia sea a mi favor. O será mi perdición. Ahora toca esperar los resultado de mi jurado, que dicten de una vez. Tienen 18 días.





me llamas, me echas
luego te vas y me dejas.

4 de enero de 2012

Vamos a hacer un trato
tú me aguantas toda la vida
y yo te quiero sin reservas.
Tú me cuentas tus desventuras
y  yo te cedo mil oportunidades.
Tú subes a ese tren
y yo te guardo un sitio a mi lado.
Tú me perdonas cada fallo
y yo te sigo al fin del mundo.
Tú y yo. Sin interposiciones.

2 de enero de 2012

Y me doy de bruces contra la nostalgia.

Y me fumo todos los recuerdos de los buenos tiempos porque ya no se me ocurre nada mejor que hacer con ellos. Y destilo sentimientos y me dedico a mezclarlos con Cola del Alimerka, porque la mayoría no se merecen ni primeras marcas. Y hago hogueras con las fotos y utilizo las lágrimas de combustible para que ardan bien. Me dedico a tirar las oportunidades por el desagüe junto con todas las sonrisas acumuladas a lo largo de los años. He intentado hacerlo bien. Lecciones de vida que te da la última noche del año, lecciones para no olvidar jamás, y 3 reglas que parece que me gusta olvidar.